La experiencia que aquí se presenta hace parte del Proyecto Virtual Renovación de la Didáctica en el Campo del Lenguaje para los Primeros Grados de la Escolaridad, desarrollado por el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe, CERLALC. Se trata de un proceso de formación, sistematización e investigación en el aula, desarrollado durante un año, cuyo propósito central es la transformación de las prácticas de enseñanza del lenguaje. Cohorte 2010, financiada por el Ministerio de Educación Nacional de Colombia, en la que participaron 120 docentes en ejercicio, de los primeros grados de escolaridad.

Me inicio en el estudio de libros álbum y establezco reglas de interacción

Sesión Nº 1:
Para iniciar, explicamos a los niños la intención que perseguíamos con las actividades a realizar: hacernos una idea o una noción básica de lo que es un libro álbum y, que para ello exploraríamos cuatro textos tipo libro álbum, los cuales posteriormente se constituirían en los materiales de lectura con los que iríamos a trabajar para conocer más acerca de este tipo de texto.

Organizados en grupos, los niños fueron recibiendo los libro álbum escogidos para esta SD, a saber: “Ahora no, Bernardo”, “Mi perro Gruyére”, “Mi mamá es MÁGICA” y “El príncipe Pedro y el oso de peluche”. A partir de esta presentación, los niños comenzaron a explorar los textos y a interactuar con ellos, observaron las ilustraciones y palabras y emitían comentarios al respecto:
- “¡Mira que mamá tan grandotota!”
- “¡Acá también hay dibujos grandototes!”
- “¡Son bonitos!”

Con preguntas sencillas, las mediadoras los incitábamos a observar y detallar más los textos escritos, por ejemplo:
-“¿Y cómo son las letras allí contenidas?”
A lo que ellos respondían:
- “Grandes”-
- “De colores” -

A la pregunta: ¿Hay más o menos palabras en estos libros con relación a los otros libros que hemos leído con anterioridad?
Ellos respondieron:
 - “hay poquitas, no, no, hay como menos”-,
-  “si, en los otros libros hay más”-,
- “hay más seño, muchas más-“. 

Luego, íbamos intercambiando los libros álbum con los otros grupos de tal forma que cada uno se hiciese una idea de cada texto. Algunos niños levantaban los libros cuando algo llamaba su atención para compartirlo con sus amiguitos.

El libro álbum que más comentarios tuvo fue “Mi mamá es mágica”, pues, a los niños les parecía sorprendente el tamaño de los dibujos y los colores. Luis quiso saber por que eran tan grandes, a lo cual algunos niños respondieron:
- “por que las mamás son más grandes que los hijitos”-
- “porque los pintores pintan cosas grandes y también chiquitas”-
- “Sí, por que la mamá es grandota y hay muchas mamás que son bien grandotas”-
En la medida en que los niños iban señalando algunas características de los libro álbum, las mediadoras anotaban en el tablero las ideas más destacadas y pertinentes.

Durante este momento de la sesión las docentes asistíamos a los grupos e indagábamos el qué pensaban los niños con preguntas sencillas como: ¿De qué creen que tratará este libro?, ¿Cómo será la historia que narra este texto?, ¿Quiénes serán sus personajes?, etc. Posteriormente, en el tablero, iban anotando dicha información e iban descubriendo diferencias, semejanzas y uno que otro dato importantes entre unos u otro texto. 

Finalmente, presentamos a los niños una cartelera decorada y les informamos que en ella guardaríamos los saberes que habíamos aprendido para tenerlos siempre presentes. Una vez terminada la consignación de la información en el cartel, ubicamos éste en un lugar visible del aula, agradecimos a los niños su participación y buena actitud durante el desarrollo de las actividades y los dispusimos para que continuaran con las actividades diarias.


Sesión Nº 2:
Ubicados en forma de mesa redonda, las docentes desarrollaron con los niños una charla en la que se les explicó la importancia de utilizar ciertas reglas para organizar mejor las participaciones y la convivencia en el aula. Así mismo, se brindó un espacio para que los niños se expresaran, participaran y dieran a conocer sus puntos de vista y, con sus aportes, construyeran colectivamente las reglas de interacción que deben ser acatadas y respetadas por todos para un buen desempeño durante la SD.

Por medio de preguntas las docentes ayudaron a los niños a expresar cuáles deben ser las normas o reglas que deben seguirse para que las acciones se lleven a cabo con orden, respeto y mucha participación, de igual forma, anotaron las ideas en el tablero. Luego los niños consignaron dicha información en un cuaderno dispuesto para ello.
Las reglas que se establecieron fueron las siguientes:
Ø  Levantar la mano para pedir la palabra.
Ø  Respetar y escuchar a otros cuando hablan.
Ø  Esperar el turno para hablar.
Ø  Hablar en tono normal sin gritar.
Ø  No estará permitido jugar durante el desarrollo de las actividades, ni utilizar juguetes.
Ø  Mantener el orden, cuando dicten su idea al niño que escribirá.
Posteriormente, se establecieron las fechas, horas y momentos en los que se llevarían a cabo las demás sesiones de la SD. Para ello se presentó a los niños un esquema guía de un cronograma de actividades, con fichas ilustrativas armables las cuales ubicaron en los días en que se trabajaría.

Análisis
Las primeras dos sesiones constituyeron dos acciones muy importantes para el desarrollo de la SD:
La primera era familiarizar al niño con la secuencia, la cual se basó en la lectura, el  análisis, la interpretación y la socialización de ideas relacionadas con libros álbum y, a partir de esto, realizar producciones escritas que constituirían libros álbumes propios.
La segunda era proponer, seleccionar y acordar algunas reglas de interacción que permitieran el desarrollo de las actividades en un ambiente de respeto, orden y participación.

Estas sesiones fueron desarrolladas por medio de actividades que le permitieron al niño conocer qué son los libros álbumes, cuáles son sus características, por quienes son realizados, de qué tratan, como son sus imágenes, sus letras, sus colores, etc.

También permitieron en el niño, además de explorar y entrar en contacto con los libros álbum, se despertaran expectativas hacia su estudio, lo que evidenciamos a través de sus múltiples preguntas y comentarios. Esto puede deberse en gran medida a las características propias de los libros álbum, especialmente las relacionadas con la combinación de imágenes y palabras en igual jerarquía, donde estas últimas se destacan por su brevedad. (Tomado del Banco del Libro, colección Formemos Lectores, Caracas Venezuela, 2001). El tamaño y colores de las ilustraciones de estos libros despertaron gran interés en los niños, pues, ellos se vieron en la necesidad de observarlos, y se formaron ideas a partir de ellas.

Las docentes hicieron uso de la pregunta como herramienta fundamental para lograr despertar el interés del niño por la lectura de los libros álbum, para llevarlos a explorarlos con mayor detenimiento, para generarles la necesidad de saber más sobre ellos, para hacer que pensaran y analizaran sus contenidos, para hacerlos cuestionarse, para que compartieran sus ideas, para que desarrollaran procesos de análisis e interpretación y, para que escribieran respecto a éstos.

Igualmente, se buscó y logró hacer un reconocimiento global sobre los niveles de lectura, escritura y sobre habilitadla maneras que tenían los niños para expresar oralmente sus ideas. El aspecto fue muy importante para el trabajo que posteriormente pretendíamos hacer, decirla que, nos permitió conocer cómo se encontraban los niños en estos procesos antes de implementar la SD, para que una vez aplicada lográramos determinar cómo y en qué proporción se generaron progresos.


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